Un cambio a mejor en 2026
Los 5 años de Juanma Moreno al frente de la Junta de Andalucía han sido un completo fiasco de quien prometió mejoras y ha acabado empeorándolo todo. La gestión del PP en Andalucía ha supuesto efectivamente un cambio, pero un cambio a peor respecto al año 2018. Es evidente que hoy la sanidad pública está peor que nunca y que esto es algo que están sufriendo en primera persona miles y miles de pacientes que padecen el deterioro de los servicios en nuestros centros de salud y hospitales. Como peor están nuestros colegios, con menos unidades de infantil y de primaria, con ratios demasiado elevadas y con subida de precios en los servicios escolares de ayuda a las familias.
Como peor está la aplicación de la Ley de Dependencia, con miles de personas en listas de espera a pesar de que la Junta de Andalucía está recibiendo la mayor cantidad de dinero procedente del Gobierno de España en la última década. Como peor están las inversiones en la provincia de Jaén, que brillan totalmente por su ausencia, pasando de un Gobierno socialista que puso en servicio 33 kilómetros de autovía en su última legislatura a una Junta del PP que ha sido incapaz de empezar a construir ni un solo kilómetro de autovía en 6 años. Ni autovías, ni Tranvía de Jaén, ni distribuidores de la capital, ni áreas logísticas en Linares, Andújar y Bailén, ni Ciudad Sanitaria, ni Ciudad de la Justicia, ni obras de abastecimiento, ni nada de nada.
En un ejercicio de cinismo sin precedentes, la Junta de Andalucía saca pecho de las cifras de empleo, cuando la realidad obvia y conocida por todos es que la buena marcha de la economía y la notable creación de empleo que se está registrando en estos años es fruto de las políticas del Gobierno de España, de su reforma laboral y de su estrategia de inversión y apoyo a los sectores productivos y emergentes. En la provincia de Jaén tenemos las cifras de paro más bajas de los últimos 16 años gracias al Gobierno de Pedro Sánchez. Los datos podrían ser aún mejores si Juanma Moreno hubiera cumplido con sus obligaciones y hubiera aprobado planes de empleo o no hubiera tenido desactivadas durante más de 3 años las ayudas a la instalación de empresas.
Por tanto, Andalucía necesita un cambio. Pero un cambio a mejor. Y la fecha en rojo es 2026, el año en que previsiblemente vuelvan a celebrarse las elecciones autonómicas. Andalucía necesita un revulsivo, un gobierno progresista que trabaje de verdad por el empleo, que proteja a las familias, que defienda el interés general de la inmensa mayoría de andaluces y, desde luego, que blinde la sanidad y la educación frente a los ataques privatizadores de la derecha. Esto no se improvisa de un día para otro. Por eso, los cambios y novedades introducidos por el secretario general del PSOE-A, Juan Espadas, son acertados. Cambios en la Ejecutiva Regional para dar un nuevo impulso a la actividad orgánica y novedades materializadas en un Gobierno Alternativo a Juanma Moreno. Ese doble espacio de acción coordinada debe servir para construir el proyecto que Andalucía necesitará a partir de 2026, para levantar un programa de gobierno que dé respuesta a las preocupaciones de la gente.
En definitiva, se trata de sentar las bases para recuperar el Gobierno de la Junta de Andalucía y volver a ponerlo al servicio de la ciudadanía, un gobierno progresista que proteja la sanidad pública y que también se vuelque en la educación, la dependencia, la vivienda y los jóvenes. Es el momento de arrimar el hombro, empujar todos y todas en la misma dirección y trabajar para presentar a los andaluces en poco más de 2 años el mejor Gobierno posible. Tenemos la alternativa en nuestras manos, hay tiempo por delante y los andaluces nos están esperando.