Congreso de los Diputados

Acabó el interminable compás de espera en España y llegó por fin el desbloqueo institucional tras la repetición de las elecciones el 10 de noviembre. La mejor noticia que podían tener los hombres y mujeres de este país es que por fin hay un Gobierno constituido y trabajando ya a pleno rendimiento, funcionando al 100% y volcado en los asuntos que más preocupan a la ciudadanía. Es un Gobierno que va a tener que afrontar importantes retos que van de lo general a lo particular. Hablamos del enfriamiento económico internacional, del Brexit, de la política comercial agresiva de Estados Unidos o del expediente Cataluña, cuestiones sin duda trascendentales que hay que acometer con rigor, firmeza y determinación.

Pero también hablamos de esas cosas que inquietan a los españoles y españolas en su día a día, que mejoran o perturban su calidad de vida, que les permiten avanzar o progresar, llegar a final de mes, cumplir un proyecto de vida o sacar adelante a su familia. Hablamos también, por tanto, de esa agenda social y ciudadana que el Gobierno socialista de Pedro Sánchez ya venía impulsando desde junio de 2018 y que afortunadamente hoy puede tener ya su continuidad con este Gobierno de coalición que ha venido a reafirmar lo sustancial de aquellos propósitos iniciales. Y no sólo lo ha reafirmado de palabra, sino que en apenas una semana ha sido capaz de aprobar y acordar algunas medidas tan efectivas como simbólicas que van a mejorar la vida de la gente, que los hombres y mujeres de este país van a notar con claridad.

Hablamos de la subida del 0,9% de las pensiones, conforme al IPC, una subida que va a permitir a 142.000 pensionistas de la provincia de Jaén no perder poder adquisitivo este año. Lejos queda aquel irracional 0,25% del Gobierno del PP con el que se condenaba a las personas mayores a vivir bastante peor que el año anterior.

Hablamos también de la subida del 2% a los 35.000 empleados públicos de la provincia. Y hablamos del acuerdo con patronal y sindicatos para la subida del salario mínimo interprofesional a 950 euros, lo que viene a culminar el incremento más elevado de la historia democrática, con casi un 30% de subida en apenas 2 años. En concreto, son 141.000 personas las que en la provincia de Jaén cobran el salario mínimo o una cuantía inferior. Algunos agoreros se han lanzado ya a propagar el mensaje del miedo, pero ya han sido desmentidos por numerosos economistas y especialistas en la materia, que han aprobado el camino iniciado por España para equiparar nuestro salario mínimo a los parámetros europeos. Por tanto, sólo hay que tener miedo a perpetuar la precariedad laboral y la injusticia salarial.

Es un Gobierno que no ha perdido ni un solo segundo en empezar a hacer lo que ha venido a hacer: mejorar la vida de las personas. Y es un Gobierno que tampoco lo va a perder para recuperar el tiempo desperdiciado en la provincia de Jaén tras 7 años infaustos del Gobierno de Rajoy. Esta tierra necesita un apoyo especial para superar la depresión que la derecha dejó tras de sí. El Gobierno de Pedro Sánchez tiene la sensibilidad necesaria con Jaén para ello, pero la provincia cuenta además con una Comisión Ejecutiva Provincial del PSOE y un Grupo Parlamentario que van a llevar la voz de Jaén, con sus necesidades y reivindicaciones, bien alta y clara al Congreso, al Senado, al Parlamento andaluz, a los Ministerios y a las Consejerías andaluzas. Siempre lo ha hecho así y así lo seguirá haciendo, independientemente de quien gobierne en cada administración. La A-32, el ferrocarril, el sector del aceite de oliva, los regadíos y las infraestructuras hidráulicas, el empleo o el turismo son cuestiones que requieren de la implicación y del compromiso real y efectivo de las administraciones. Sabemos que el Gobierno de España las tiene en agenda y garantizamos que el PSOE de Jaén estará ahí para desarrollarlas.